¿Estrés en el trabajo? Factores Psicosociales

Hoy en día vivimos en un mundo de “no parar”, de ir corriendo a todos lados, de llevar ciertas cargas de trabajo y esto puede afectar negativamente a nuestra salud.

Un tema de estudio interesante para la psicología del trabajo son los factores psicosociales. Éstos pueden ser negativos o positivos y de ambas formas afectan a la vida del trabajador. En el caso de afectar negativamente, podemos llamarlos “factores de riesgo” y llevan al estrés laboral.

Los factores psicosociales según Tovalín y Rodríguez (2011) “emergen en una actividad y entorno laboral específicos, se dan bajo un proceso de interiorización donde el trabajador puede ser o no consciente de este proceso, generando mecanismos para enfrentar la demanda expuesta en su entorno, calificarlo o evaluarlo siendo su referencia él mismo, sus capacidades, habilidades o destrezas. Si se equilibran los atributos físicos y psicológicos con la demanda laboral, el resultado son mecanismos que favorecen el bienestar del trabajador y el refrendo de su valía personal, si ocurre lo contrario, el proceso se convierte en una paulatina pérdida o desgaste de destrezas y habilidades tanto físicas y psíquicas; en ese momento, el trabajador estaría en riesgo psicosocial.”

Encontramos diversos factores psicosociales, que dependiendo del grado o situación en la que se den, podrán ser mejores o peores para la persona.

A continuación, una serie de ejemplos de factores psicosociales que podrían convertirse en factores de riesgo ante las siguientes situaciones:

-Ambiente y equipos: Unas condiciones malas de trabajo o equipos inadecuados.

-Relaciones interpersonales: El aislamiento, las pocas relaciones con los jefes o compañeros, los conflictos interpersonales y la falta de apoyo.

-Desarrollo de carrera: La incertidumbre de la carrera profesional, la baja promoción o la poca remuneración.

-Relación familia-trabajo: Dificultades en el equilibrio entre familia y trabajo, poco apoyo familiar, escasa conciliación.

-Autonomía: Escasa participación en las decisiones o poco control sobre el trabajo.

-Sobrecarga: Exceso de trabajo, presión, plazos de finalización urgentes.

Factores como los nombrados pueden afectar al trabajador de forma tan negativa que pueden llegar a necesitar ayuda psicológica para afrontar su trabajo en su día a día.

No obstante, la tarea del psicólogo de la organización consta en analizar la situación de las personas empleadas e intentar que estos factores sean positivos para así aumentar la satisfacción, motivación y productividad del empleado.