¿Por qué dormimos?

DORMIR ES DISTRAERSE DEL MUNDO. Jorge Luis Borges

El sueño… Seguramente seas de las personas que piensan que al dormir perdemos tiempo y hay mucho que hacer. Incluso habrás dicho en alguna ocasión la típica frase: “Ya dormiré cuando muera”. Pues bien, tengo malas noticias para ti (y buenas para tu organismo): Necesitas dormir. De hecho, sin el sueño puedes llegar a morir.

El sueño es importante porque al dormir activas el mecanismo de supervivencia cerebral. Es fundamental porque en este momento el cerebro limpia todos los metabolitos tóxicos que se han generado durante el día. Además, se forman las nuevas sinapsis del día más rápidamente. Lo que hace que se consolide el aprendizaje basado en la memoria y la experiencia. Estaríamos hablando más que de una respuesta adaptativa (que también), de un periodo de restauración.

¿Qué pasa cuando no duermes?

Cuando llevas varios días sin dormir tienes efectos como distorsiones perceptivas y alucinaciones leves. Además de tener dificultades para realizar tareas que necesitan de tu concentración durante un tiempo. Por lo que la privación del sueño daña el funcionamiento cerebral.

Parece que la fase de sueño profundo de ondas lentas es la más importante, pues es la que permite que el cerebro se recupere. En animales privados de sueño aparecen síntomas como el aumento de la tasa metabólica y la temperatura corporal. Hambre voraz y pérdida de peso, pero no se han encontrado signos de estrés.

En el ser humano existe un trastorno hereditario llamado: Insomnio familiar fatal. Provoca que el tálamo se degenere, aparece un estado similar al ensueño, déficit de atención y memoria. Conforme pasan las horas y va aumentando el insomnio, la persona pierde el control del sistema nervioso neurovegetativo y el sistema endocrino. Tras un proceso de varios meses de insomnio el sujeto muere.

¿Y en cuanto a la actividad diaria?

No se ha demostrado que el descanso tenga que ser proporcional a la actividad física diaria que realizas. En estudios que se realizaron a personas con diferentes tipos de actividad y profesiones se llegó a ésta conclusión. La función básica del sueño parece que no es la de proporcionar al cuerpo la oportunidad de que se reponga del desgaste físico diario. No obstante, la función más importante es la de disminuir el metabolismo cerebral (en el sueño de ondas lentas) y hacer que el cerebro descanse de la actividad mental diaria. Pues ésta sí que ocasiona un aumento del sueño de ondas lenta en la noche siguiente.

Por último, ¿qué podemos decir sobre el sueño REM?

En este caso, los estudios no son concluyentes. Se sigue investigando, ya que sus funciones se conocen menos que las del sueño de ondas lentas. Pero se conoce que puede favorecer el desarrollo cerebral y el aprendizaje. En los estudios realizados hasta el momento se han encontrado correlaciones entre el sueño y el aprendizaje. Cuando privamos a seres humanos y animales de sueño REM tardan más en realizar una tarea, por lo que aprenden más lentamente. Retrasa la formación de la huella de memoria.

Además, se ha llegado a la conclusión de que el aprendizaje puede influir en la cantidad de sueño REM posterior. Descubrieron que en estudiantes universitarios en época de exámenes aumenta el sueño REM, puesto que dedicaban más tiempo en aprender nueva información. Por lo tanto, cuando estás en periodo de aprendizaje, tu cerebro automáticamente aumenta la cantidad de sueño REM. Necesario para formar la huella de memoria.

Para finalizar, todos sabemos lo que cuesta mantenernos despiertos cuando nos llega la sensación del sueño. Nadie puede salvarse a la necesidad de dormir que se apodera de nuestro cuerpo. No importa lo que te esfuerces por mantenerte despierto. Será más fuerte que tu. ¿Por qué es tan fuerte esa sensación? Porque el cuerpo es sabio, y es importante. Trata de mantenerte vivo. Hazle caso y duerme. Dulces sueños.